Una de las cosas que más recuerdo de pequeño (y seguramente que muchas más personas habrán compartido situaciones parecidas) es el hecho de hablar de cuantos "metros" podían soportar bajo el agua nuestros increíbles relojes Casio de la época. Era una preencia popular (a lo menos en la zona donde yo vivía) que la "M" que acompaña a muchos modelos de reloj con la característica de Water Resistant se refería al los metros de agua que soportaba en una inmersión. Pero, como en muchas otras cosas de niños, no estábamos en lo cierto cosa que por desgracia comprobábamos por las malas cuando nuestros relojes de 30M muchas veces quedaban inservibles tras su paso por la piscina una calurosa tarde de verano. Creo que la mejor forma de resumirlo es mediante una pequeña pero clara tabla:
Hoy en día muchos de los relojes medianamente económicos sólo son "Water Resistant" sin más indicación. Estos relojes tan sólo resisten mojado accidental de forma ligera (alguna gota de lluvia) pero mejor si no les toca el agua. La siguiente gama, de 30M, eran los más habituales hace unos años pero personalmente yo cada vez los veo menos pues la verdad es que la diferencia entre 30M es bastante escasa. Con 50M el reloj teóricamente ya soportaba más trajín como por ejemplo duchas y era adecuado para nadar o cualquier trabajo relacionado con el agua que no fuese buceo aunque no sería la primera vez que veo fallecer un reloj de 50M tras su paso continuado por una piscina. A partir de 50M ya hablamos de palabras (y precios) mayores siendo la gama de 200M/300M la más usada en la actualidad.
De todas formas, aunque un reloj indique de forma correcta su resistencia al agua, no tiene porque ser correcta, pues si no ha tenido un mantenimiento adecuado a lo largo de los años, se trata de un reloj de época o simplemente se le ha cambiado la batería sin sellarlo correctamente podemos llevarnos una desagradable sorpresa tras su paso por el agua.
0 comentarios:
Publicar un comentario