martes, 29 de julio de 2025

Primeros Pasos: Marvel reivindica a su primera familia

¡Cómo pasan los años! Después de décadas viendo fracasar una y otra vez los intentos de llevar a la primera familia de Marvel a la pantalla grande, por fin llegó algo que no me hizo salir del cine pensando un "meh, podría ser mejor". Y no, no es que mis expectativas estuvieran por los suelos después de los últimos desastres de Fox (Dark Phoenix me parece intragable) y la racha mediocre que ha tenido Marvel últimamente... bueno, vale, sí estaban por los suelos. Pero me equivoqué, y me alegra haberme equivocado. Entré al cine con esa sensación que seguro muchos compartís: esa mezcla de curiosidad y una pizca de inquietud; sin saber si vas a disfrutar una buena película o si vas a perder dos horas que no volverán. Pero la pasión por el cine puede con todo y uno siempre tiene la esperanza de que la próxima será la buena. Y para mi sorpresa, esta vez la experiencia mereció la pena. Salí de la sala satisfecho, con la sensación de que el tiempo había estado bien invertido.

Además, en esta ocasión me animé a ver la versión en 3D, algo que hacía tiempo que no probaba, aunque en casa tengo televisión compatible y reconozco que casi nunca la uso para esta finalidad. Fui el día del estreno, a la primera sesión y tenía la impresión de que habría mucho ambiente… pero lo cierto es que el panorama era bastante tranquilo. Aparte de dos madres con sus hijos (lo deduje por los comentarios y las palomitas de rigor), sólo había tres hombres más, todos de mediana edad, que habían ido solos a disfrutar la película. Muy poco público en la sala (donde cogen cientos de personas) pero, por otro lado, eso también tiene sus ventajas: la proyección fue tranquila, sin interrupciones de móviles ni ruidos molestos. Se agradece ver una película así, en silencio y sin distracciones.


Sentado en aquella sala medio vacía y con las gafas de 3D llenas de huellas (que limpié de la mejor forma que pude con mi camiseta), estaba listo para que la película me sorprendiera o, al menos, para dejarme llevar por la experiencia sin las distracciones habituales. Quizá por eso, con todo el entorno tan calmado y toda la atención puesta en la pantalla, los detalles visuales y la puesta en escena destacaron aún más de lo normal.

Lo primero que te golpea es el diseño visual, y cuando digo que te golpea es literal. Esa Nueva York retrofuturista de los años 60 no es sólo una decisión estética molona para quedar bien, es todo una declaración de intenciones. Matt Shakman logró crear un mundo que se siente completamente diferente a todo lo que hemos visto en Marvel; y eso se agradece cuando ya llevas más de una década viendo la misma paleta de colores gris-azulada en todas las películas del UCM. Es como si por fin alguien entendiera que los cómics de Kirby y Lee no necesitaban ser "actualizados" o "hechos más realistas" para funcionar en pantalla. Necesitaban ser llevados al cine con respeto y amor, y eso es exactamente lo que pasó aquí. Los colores vibrantes, los coches voladores, esa mezcla entre Los Supersónicos y 2001: Una Odisea del Espacio funciona perfectamente. Es un mundo donde puedes creerte que Reed Richards construye máquinas imposibles en su salón y nadie encuentra raro que una mujer se vuelva invisible mientras está embarazada.

Admito que al principio no me gustaba mucho la elección de Pascal. Pero su Reed Richards es exactamente lo que tenía que ser: un genio científico emocionalmente torpe, obsesivo con sus proyectos pero que genuinamente ama a su familia. No es el Reed estirado y aburrido de las versiones anteriores que parecía que había salido de un manual de "Cómo Ser Condescendiente 101". Pascal logra algo muy difícil: hacer que Reed sea inteligente sin que parezca condescendiente y humano sin que parezca débil. Cuando lo ves lidiar con las presiones de ser padre, esposo y salvador del mundo al mismo tiempo, entiendes por qué eligieron a un actor maduro para el papel.

Vanessa Kirby como Sue Storm es todo lo que el personaje necesitaba ser en el cine pero nunca había sido: fuerte sin ser gritona, maternal sin ser blanda, poderosa sin ser arrogante. Es el verdadero corazón de la película y la química entre Pascal y Kirby es muy buena pues realmente crees que son una pareja que ha pasado por cosas juntas, que se conocen, que se apoyan mutuamente cuando el mundo se está acabando. Por otro lado, Joseph Quinn logra dar una versión más inteligente y madura de Johnny Storm, alejándose de los estereotipos del hermano menor irresponsable que solo existe para hacer chistes malos y prender fuego a cosas. Y Ebon Moss-Bachrach humaniza a Ben Grimm de una manera que considero que las películas anteriores nunca lograron.

Lo que más me gustó es que esta no es una película de origen tradicional de esas que nos tienen hartísimos. Los Cuatro Fantásticos ya llevan cuatro años operando, ya son una familia establecida, ya se conocen los poderes de cada uno y ya tienen su dinámica. La película no pierde tiempo explicándonos cómo obtuvieron sus poderes; eso se despacha en una conversación de dos minutos y listo. Se enfoca en lo que realmente importa: las relaciones. Ver a Reed y Sue lidiar con ser padres primerizos mientras el mundo está en peligro, ver a Johnny crecer y madurar de verdad en lugar de seguir siendo el eterno adolescente, ver a Ben encontrar su lugar en esta familia extraña que ha formado...

Después del desastre de la nube cósmica en 2007 que parecía sacada de un salvapantallas de Windows 95, tenía miedo de cómo iban a manejar a Galactus. Pero Ralph Ineson le da una presencia imponente al personaje que por fin lo trata como la amenaza cósmica que es. No es perfecto (hubiera preferido verlo más como la fuerza cósmica abstracta que es en los cómics) pero funciona dentro del contexto de la película. La Silver Surfer de Julia Garner también me sorprendió positivamente. Sí, es diferente al Norrin Radd que conocemos, pero Shalla-Bal funciona para esta historia específica y visualmente, cuando la ves deslizándose por el espacio en esa tabla mientras el universo se desmorona a su alrededor, es realmente espectacular.

Pero no voy a fingir que la película es perfecta, porque no lo es. El ritmo se vuelve irregular en ocasiones y hay momentos donde se nota que cortaron escenas importantes durante la edición (sobre todo en el primer acto). También, y esto es algo que me chirrió bastante, hay muy pocas escenas donde realmente vemos a los personajes usando sus poderes de maneras creativas. Para ser una película de superhéroes, tiene sorprendentemente poca acción "superheroica". Es más drama familiar que espectáculo, lo cual no está mal per se, pero a veces extrañas ver a Reed realmente "estirar" sus habilidades más allá de convertirse en una goma elástica básica.

La comparación inevitable con "Superman" de James Gunn es favorable para ambas películas. Ambas comparten un enfoque en la esperanza, la familia y un tono más optimista que contrasta con el grimdark que había dominado el género los últimos años. Y, por si alguien tiene curiosidad, aunque siento más "apego" por Superman, esta película de Marvel me parece mejor, como película, que la opción de DC.

¿Es la Película que los Fanáticos Merecían? ¡Sí! 


Después de varios intentos relativamente fallidos (la de 2015 falló estrepitosamente) que parecían hechos por gente que nunca había leído un cómic en su vida, sí, creo que finalmente tenemos una película de los Cuatro Fantásticos que entiende qué hace especiales a estos personajes. No son los Vengadores, no son los X-Men... Son una familia de exploradores que casualmente tienen superpoderes.

Mi Veredicto Personal

Salí del cine con una sonrisa, lo cual no me pasaba con una película de Marvel desde hace bastante tiempo; la última fue la de "Deadpool & Wolverine". No es la película perfecta de superhéroes, pero es exactamente la película de los Cuatro Fantásticos que necesitábamos. Es colorida, divertida, emotiva y, por primera vez en décadas, trata a estos personajes con el respeto que merecen.

¿La recomiendo? Absolutamente. Especialmente si, como yo, habías perdido la fe en que Marvel pudiera hacer algo especial. Con su estética distintiva, reparto comprometido y enfoque en las relaciones familiares, "Primeros Pasos" marca el comienzo prometedor de una nueva era para los Cuatro Fantásticos en el cine.

Mi calificación: 7/10 - Una introducción sólida y visualmente espectacular que, pese a sus limitaciones, finalmente hace justicia a los Cuatro Fantásticos. Y después de tantos años de decepciones, eso ya es bastante.